Océano Azul

Establece que en un océano rojo ya existen muchos tiburones, los peligros se maximizan, por lo tanto, las posibilidades para crecer o en su caso incorporar nuevos productos puede ser con un grado de complejidad mayor y costos más elevados, mucho depende del lugar que ocupa la empresa en el sector, tampoco pretendemos decir que con esto, no hay que hacerlo, ya que está demostrado que aun cuando la empresa ocupe una posición privilegiada esta se puede acabar de un momento al otro, como lo hemos comentado anteriormente “hay que salirnos de la caja”, “romper paradigmas”.

En muchos de los océanos rojos, existen adicionalmente muchos problemas causados principalmente por la sobre población de marcas y en cada una de estas todas las variables establecidas, es claro que esto es para ofrecer más alternativas a los consumidores, pero se puede llegar al punto en el que el diferenciador ya no sean las características técnicas, funcionalidad y diseño del producto, ya son tan extensas las variables en muchos productos que el cliente deja de tener un conocimiento amplio sobre estos y, por lo tanto, solo se basa principalmente en dos diferenciadores, el precio y los servicios adicionales alrededor del producto esto se observa en casi todos los mercados.

El azul supone más posibilidades con otro tipo de riesgos y claro un océano sin tiburones siempre será más seguro, tal vez no corramos el riesgo que nos coman y podamos avanzar muy rápido, pero si nos podemos ahogar si no estamos preparados.

Dicho lo anterior esta estrategia propone cambiar nuestra forma de hacer negocios, buscar oportunidades en otros mercados, nuevos o poco explorados, utilizando la innovación en un sentido amplio, no solamente desde el punto de vista tecnológico, también en proceso, como vendemos, como ofrecemos el producto, como lo publicitamos, producimos, entre otros, esto dando lugar a uno de sus puntos principales "Innovación de Valor"